Es originaria de la región central de Brasil, Venezuela y Surinam. La piña enana crece de forma silvestre a una altura sobre el nivel del mar entre cero y 1000 m. de altitud. Es una planta perenne de hojas angostas, arqueadas, armadas de aguijones en forma aserrada en los bordes. Posee frutos en largos pedúnculos que salen del centro de la roseta de hojas. Se propaga por brotes que nacen al pie de las plantas adultas, y por las coronas de las hojas de los frutos. Requiere suelos húmedos y ambientes con mucha iluminación.

Por ser una planta cuyo fruto es pequeño, suele ser cultivada en materos y jardines. La fruta no se considera comestible.